ACTIVA CULTURA

Educando para la paz

Asociación para la Formación y Promoción Cultural y Social de El Salvador

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Programas

1. Conflicto, paz y derechos humanos

Fortalecer a instituciones y sociedad civil en la definición de políticas y prácticas de justicia.

2. Niñez, adolescentes y juventudes (NAJ)

Fortalecer la capacidad de los jóvenes, para hacer frente a los impactos negativos de los conflictos.

3. Memoria y reconciliación

Construcción de procesos personales y sociales de justicia y diálogo restaurativo.

4. Fortalecimiento Institucional

Fortalecer la capacidad de gestión para responder efectivamente a las demandas de los socios

Conflicto, paz y derechos humanos

En tres países de la región centroamericana —El Salvador, Guatemala y Honduras—, los índices del crimen y la violencia se encuentran entre los tres más altos de América Latina; en los demás países de la región —Costa Rica, Nicaragua, Panamá y Belice— los niveles de crimen y violencia son significativamente menores, pero con un aumento sostenido en años recientes (según un estudio recientemente publicado por el Banco Mundial).Según el Informe sobre desarrollo humano de Naciones Unidades para América Central (2009-2010), la región posee una tasa de 29,3 homicidios por cada 100 mil habitantes (2004), superada solo por la región sudafricana, con 31,7 por cada 100 mil habitantes. Acorde con este dato, Centroamérica resultaría ser la región más violenta del planeta, si se exceptúan aquellas que están siendo afectadas por una intensa violencia política. Adicionalmente, se suma a esto la incapacidad del sistema de justicia en la región, el cual no está generando las respuestas necesarias para enfrentar la impunidad.En el área de investigación y persecución penal son escasos los casos que culminan en juicio, lo cual genera el incremento de privados de libertad sin condena, así como cárceles hacinadas.

En este contexto, en los últimos años la delincuencia organizada ha generado acciones en territorio centroamericano para sus operaciones criminales, en particular el tráfico de droga. El éxito de la guerra contra el narcotráfico en Colombia y la guerra frontal que libra México en la actualidad han generado la expansión de la narcoactividad hacia la región.

Esta amenaza se presenta en una región en donde la debilidad de los Estados no es solo de carácter nacional, sino es algo que se refleja hacia el ámbito de la institucionalidad regional.En ese sentido, la región se enfrenta a fenómenos que, por un lado, emergen desde las condiciones internas de sus propias sociedades y, por el otro, provienen de condiciones exógenas, que hoy por hoy están constituyendo una amalgama de situaciones criminales que tiene como característica los niveles altos del uso de la violencia, con consecuencias que impactan en la vida social.

Eso significa, entonces, repensar los desafíos no desde la estrecha visión nacional, sino desde una perspectiva regional, ya que los fenómenos que enfrenta Centroamérica forman parte de fenómenos de alcance mundial que requieren mecanismos de cooperación y coordinación multinacionales.

Objetivo estratégico

Mejorar la capacidad de gestión y transformación de conflictos para hacer frente a la inseguridad por medio del fortalecimiento de sus instituciones y del empoderamiento de la sociedad civil.

Líneas de acción

  • Establecer alianzas estratégicas con organismos regionales e instituciones nacionales para la implementación y mantenimiento de los procesos que se impulsen relacionados con seguridad, prevención y justicia.
  • Coordinación de estrategias nacionales por medio de la operativización de esfuerzos en el nivel local, los cuales se basan en el desarrollo de planes de acción locales.
  • Fortalecer y en algunos casos crear redes de sociedad civil relacionadas con la temática de seguridad y justicia para la incidencia en políticas de carácter nacional.
  • Desarrollar Investigaciones para incidir en las políticas públicas de seguridad y otras desde las evidencias con enfoque en Conflictos, paz y derechos humanos

Resultados previstos

Para el 2024 se espera que:

  1. Se cuenta con un sistema de información y análisis que provee información para la toma de decisiones efectivas en políticas de seguridad en El Salvador.
  2. Se habrán generado alianzas con actores estratégicos a nivel Nacional con el objetivo de propiciar sinergias e impulsar procesos coordinados para el mejoramiento de los niveles de seguridad a nivel nacional y en la región.
  3. Se han generado redes sociales relacionadas con el tema de seguridad que están coordinadas e inciden en el Estado e instancias regionales.
  4. Se han fortalecido las capacidades sociales e institucionales para enfrentar la problemática de inseguridad en El salvador y en Centroamérica.
  5. Se han generado investigaciones que han sido retomadas en los tomadores de decisión para construcción de políticas públicas con un enfoque de conflictos, paz y Derechos Humanos.

Niñez, adolescentes y juventudes (NAJ)

Objetivo estratégico

Fortalecer la capacidad de las y los jóvenes, la sociedad en general y el Estado, para hacer frente de manera conjunta al impacto negativo que ejercen los conflictos sobre las juventudes en El Salvador.

 

Contribuir a la construcción y reconstrucción de las relaciones de confianza, en la sociedad y entre la sociedad y el Estado.

Niñez, adolescentes y juventudes (NAJ)

En los últimos años se ha suscitado un auge alarmante de los índices de violencia en Centroamérica. El impacto de esa problemática creciente atenta contra la estabilidad, debilita la democracia y amenaza la paz en la región. Día a día, muchos jóvenes se ven involucrados de una u otra forma en esa espiral de violencia, sea como perpetradores de hechos delictivos o como víctimas. En ese marco, las soluciones eficaces y sostenibles han sido insuficientes; muchas de las estrategias implementadas han privilegiado las acciones reactivas y de control por encima de la prevención, han carecido de coordinación pero, sobre todo, han sido indiferentes a escuchar la voz DE LA N de las y los adolescentes y jóvenes, quienes suelen permanecer marginados e ignorados desde el punto de vista económico, social y político. En términos generales, se considera a la niñez, adolescencia y jóvenes parte del problema pero no de la solución; en esta arena, sus aportes suelen considerarse irrelevantes.

 

Para contribuir a revertir estas tendencias en Centroamérica, Activa Cultural, busca, generar condiciones para que el tema de la violencia asociada con juventudes sea enfocado desde la visión incluyente y transformadora que prima en los ideales de consolidación de la paz. Desde 2015, comenzó a implementarse procesos de apoyo a la institucionalidad del ISNA con menores infractores de la ley, lo cual condujo a la creación de programas de becas universitarias a menores en condiciones de imposición de medidas a la privación de libertad. En 2008 en adelante surgieron múltiples iniciativas en la sociedad civil sobre la necesidad de Políticas Públicas para Prevenir la Violencia Juvenil en Centroamérica, el cual cumplió con el mandato de implementar en El Salvador procesos participativos e incluyentes de diálogo y consulta, producto de los cuales se elaboraron propuestas consensuadas de política pública para la prevención de la violencia asociada con la adolescencia y la juventud. Desde 2015, se han propuesto y presentado públicamente varias propuestas de la sociedad civil incluso el Consejo nacional por la Seguridad y la convivencia ha generado una articulación de actores en torno al PESS (Plan El Salvador seguro) y se generaron e impulsaron acciones al servicio de los municipios priorizados que ostentan mayores índices de violencia asociada con las juventudes.

 

Es necesario desde la niñez, la adolescencia y juventudes generar sinergias de INCLUSIÓN para construir capacidades y habilidades de gestión y transformación de los conflictos con enfoque de derechos para una cultura de paz sostenible.

Objetivo estratégico

Fortalecer la capacidad de las y los jóvenes, la sociedad en general y el Estado, para hacer frente de manera conjunta al impacto negativo que ejercen los conflictos sobre las juventudes en El Salvador.

 

Contribuir a la construcción y reconstrucción de las relaciones de confianza, en la sociedad y entre la sociedad y el Estado.

Líneas de acción

  • Generar políticas públicas sobre prevención de violencia juvenil a nivel nacional.
  • Generar y operacionalizar lineamientos estratégicos en materia de prevención de violencia asociada con las juventudes, sobre la base de los desafíos y respuestas compartidas.
  • Generar y dar seguimiento a la operativización de planes municipales de prevención de la violencia asociada con la niñez, adolescencia y juventudes.
  • Fortalecer redes y organizaciones de niñez, adolescentes y juveniles que de una u otra forma abordan el tema de prevención de la violencia asociada con la niñez, adolescencia y las juventudes.
  • Sensibilizar a los medios de comunicación en el tratamiento de la violencia.
  • Promocionar el conocimiento especializado sobre el tema mediante la elaboración y/o divulgación de investigaciones que contribuyan a la mejor comprensión del fenómeno.
  • Se mantiene comunicación cercana y trabajo coordinado de forma permanente con organizaciones juveniles y redes de juventudes que operan en El Salvador.
  • Impulsar la organización garante de los derechos y deberes de la niñez, adolescencia y juventudes desde un sistema   comunitario y local de protección.

Resultados previstos

Para el 2024 se espera que:

  1. Se haya incidido en el diseño de políticas públicas en materia de prevención de la violencia asociada con la niñez, adolescencia y la juventud en El Salvador así como en su acompañamiento, priorización de acciones concretas y empoderamiento de la sociedad en su rol de fiscalización social.
  2. Se cuente con lineamientos nacionales de prevención de la violencia asociada con la niñez, adolescencia y las juventudes asumidos por instancias del estado y con influencia positiva en los niveles nacionales.
  3. Se haya contribuido en el diseño y acompañamiento de al menos 10 planes locales-municipales de prevención de la violencia asociada con la niñez, adolescencia y las juventudes.
  4. Se cuente con medios de comunicación sensibilizados en el manejo de la información sobre violencias contra la niñez, adolescencia y juventudes.
  5. Se haya promovido la coordinación e integración de las distintas redes de organizaciones  de niñez, adolescentes y juveniles que operan en el Salvador

Memoria y reconciliación

La construcción de la paz exige como fin último la reconciliación. Este objetivo va más allá de la mera firma de un acuerdo de paz para poder superar la mentalidad de confrontación. Es un proceso de la propia sociedad afectada por una guerra o un conflicto que implica el reconocimiento mutuo de los daños causados, el arrepentimiento y compromiso a no repetirlos, la reparación de agravios pasados (aunque no la venganza), la superación de los traumas, la creación de unas nuevas relaciones sociales y, en definitiva, un cambio en las percepciones mutuas y las actitudes hacia el otro. Por consiguiente, requiere un tránsito desde los sentimientos de desconfianza, hostilidad y odio hacia los de respeto, confianza, solidaridad, armonía, participación y desarrollo compartido (Bennett y Kayetisi-Blewitt, 1996).

 

La reconciliación es un proceso de largo aliento que no sigue un esquema pre establecido, sino que es movido por una dinámica específica del contexto. Debe provenir del seno de la sociedad y su acento, más que sobre lo individuos, debe ser social. Es un objetivo transversal que debería inspirar todas las políticas públicas y los programas de desarrollo, a fin de superar las tensiones causantes o resultantes del conflicto. Así, la reconciliación requiere avanzar en los múltiples campos que conforman la denominada seguridad humana, esto es, el desarrollo humano sostenible, el bienestar socioeconómico, la seguridad física, la democracia participativa (reforzando el tejido social y asociativo), el respeto a los derechos humanos (por ejemplo, mediante programas de sensibilización), la no discriminación de minorías, el buen gobierno, etc.

La no violencia ayuda a la reconciliación. Los principios que fundamentan esta teoría pueden resultar bastante útiles. Entre ellos, la recuperación de la palabra, el diálogo y la escucha (la historia de la violencia ha sido en gran medida la historia de la negación de la palabra, de la privación de la palabra a grupos que han debido permanecer forzosamente en el silencio). Lo más significativo del ser humano —para expresar su identidad, su dignidad y su libertad— es precisamente la posibilidad de expresarse como tal a través de la palabra. Muchas víctimas, muchos desaparecidos han sufrido la negación del verbo, que es una forma de olvido y de muerte civil. La palabra y la memoria ayudan a la reconciliación porque permiten un reconocimiento de la otredad, de la diversidad de discursos, perspectivas e identidades.

Hacer frente a la cuestión de la reconciliación a nivel social y político es fundamental actualmente en El Salvador, aunque también es un tema latente que tiene validez en otras naciones centroamericanas.

Objetivo estratégico

Fortalecer y/o apoyar la creación de mecanismos nacionales  de diálogo y cohesión social que integren los esfuerzos del Estado y las sociedad para hacer frente común a los problemas nacionales.

Líneas de acción

  • Generar condiciones para la reconciliación social mediante la promoción de confianza y el acercamiento entre actores y sectores confrontados.
  • Generar un proceso de investigación, acción y participación que permita a los actores locales definir los aspectos clave relacionados con la polarización social, que permitan además la identificación de propuestas de solución desde la perspectiva de los actores locales.
  • Propiciar espacios seguros y dialógicos mediante los cuales actores y sectores más afectados por las consecuencias negativas del conflicto y por la violencia puedan abordar sus necesidades particulares de reconciliación.
  • Construir comunidades con memoria y generar procesos de reconstrucción social desde la memoria con sectores de la sociedad salvadoreña.

Resultados previstos

Para el 2024 se espera que:

  1. Haber generado acercamiento, diálogo y confianza entre sectores polarizados, contribuyendo de esta manera al desbloqueo de actitudes intransigentes y adversarias entre actores y/o sectores confrontados.
  2. Impulsar la memoria de las comunidades desde la organización social, Construir memoria e impulsar el movimiento de memoria. 
  3. Haber generado documentos y herramientas destinadas a promover la reconciliación efectiva de los distintos actores sociales.
  4. Haber promovido procesos de incidencia y acompañamiento a las recomendaciones y soluciones sugeridas en los distintos espacios de diálogo y reconciliación promovidos por ACTIVA CULTURA.
  5. Posicionar y generar procesos de justicia, prácticas y diálogos restaurativos con menores en conflicto con la ley.
  6. Generar capacidades de prácticas restaurativas en el sector justicia del Salvador.

 

Fortalecimiento Institucional

Objetivo estratégico

Investigar para  la transformación  de conflictos y generación de políticas públicas basadas en evidencias.

Fortalecimiento Institucional

El concepto de “institución”, para ACTIVA CULTURA, lejos de definirse como algo estático, preestablecido e inamovible, comprende tres planos o momentos dinámicos: 1) una misión o apuesta política, 2) una organización, es decir el conjunto de relaciones sociales que permitan que se avance el logro del proyecto y 3) el conjunto de recursos, tanto humanos, como materiales y financieros que viabilicen la realización del proyecto.

 

Estos tres planos están en constante movimiento e interrelación. El fortalecimiento institucional es el resultado de una serie de acciones que implícita o explícitamente pretenden la mayor coherencia entre estos tres elementos. En este sentido, el fortalecimiento institucional se trata de un abordaje integral que considere tanto los aspectos ideológicos, organizativos relacionales, así como la revisión de los recursos de la institución. Es importante destacar que esto también debe entenderse, no sólo a lo interno de la organización, sino también a través de su relación con el entorno, pues esto es lo que permite su fortalecimiento efectivo y pasa por entender realmente su función social, su manera de operar y organizarse.

 

En un sentido pragmático, el fortalecimiento institucional también implica la modernización del diseño de procesos; definición de estructuras de gestión y normas de gestión; sistemas de capacitación permanente para distintos sectores; la comprensión adecuada de la rendición de cuentas y de lo que implican el monitoreo y la evaluación como herramienta programática de gestión; el mejoramiento en la prestación y operación de servicios; las estrategias de comunicación efectiva; el desarrollo de sistemas informáticos y financieros, entre otras acciones.

Objetivo estratégico

Investigar para  la transformación  de conflictos y generación de políticas públicas basadas en evidencias.

Líneas de acción

  • Capacidad de gestión programática y la cobertura o presencia en El Salvador.
  • El personal de ACTIVA CULTURA recibe una formación pertinente y oportuna en temas de consolidación de paz.
  • Sensibilizar y fortalecer la capacidad de seguimiento efectivo, sistematización, monitoreo y evaluación de los distintos programas en el Salvador
  • Promover y generar espacios de participación en el marco de las comunidades de práctica para fortalecer las capacidades de aprendizaje a través del intercambio de experiencias y lecciones aprendidas y la mejor gestión de conocimiento a nivel institucional.
  • Contar con una función de recursos humanos que desarrolle, mantenga y comunique políticas de RR.HH., normas, sistemas y procesos que garanticen los compromisos en la materia y estén alineados con los objetivos y principios de consolidación de la paz de Activa Cultura, en los que se garantice un clima laboral en Activa Cultura
  • Gestión financiera, transparencia y adecuada rendición de cuentas para mantener la confianza de los donantes y la confianza en la organización.
  • Impulsar la proyección institucional a través de estrategias comunicacionales
  • Construir los primeros   manuales de   funcionamiento   y reglamento interno conforme al crecimiento.
  • Contar con Facturas, comprobantes de donación para la generación de consultorías y desarrollar el área de sostenibilidad.

Resultados previstos

Para el 2024 se espera que:

  1. Activa Cultura cuenta con recursos financieros sostenibles para la implementación adecuada de al menos dos programas.
  2. Activa Cultura cuente con recursos (humanos, financieros y técnicos) y una capacidad de gestión responsable y transparente que garantizan la apropiación, el logro de objetivos y la aplicación de la visión estratégica.
  3. Se ha logrado establecer una estrategia de comunicación que permite socializar de manera efectiva los avances y logros de los programas y ha posicionado a Activa Cultura a nivel nacional.
  4. Se institucionaliza una cultura organizacional orientada a resultados, a través de un sistema de monitoreo y evaluación y se promueve una adecuada gestión del conocimiento.
  5. Se cuenta con un grupo de apoyo a los programas, integrado por los donantes y organizaciones afines, que participan plenamente y tienen acceso a mayor información, mejor conocimiento de las realidades en el terreno, y mejores oportunidades de poder desarrollar iniciativas más coordinadas.

 

ORGANIGRAMA

ACTIVA CULTURA 2019 –2024

Asociación para la formación y promoción cultural y social de El Salvador.

“Como organización que fortalece habilidades en los actores y sectores nacionales, estamos conscientes de que la comprensión actual de los retos que implica el trabajo de consolidación de la paz es limitada. Por tanto, estamos comprometidos con fomentar su desarrollo en términos de nuestra propia capacidad”.